CARTA DE HAROLD ESTES
AL PRESIDENTE OBAMA
Traducida por The Puerto Rico Armed Citizen
Estimado Sr. Presidente Obama:
Mi nombre es Harold Estes, presto a cumplir 95 años el
próximo 13 de diciembre de este año. Las
personas que me conocen por primera vez no creen mi edad porque a pesar de los
años he permanecido sin arrugas y mentalmente ágil.
Me enlisté en la Marina de los Estados Unidos en 1934 y
serví con orgullo, antes, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, de
donde me retiré con el rango de Master Chief Bos'n Mate. Ahora vivo en una égida ubicada en el extremo
oeste de Pearl Harbor, lo que me permite mantener vivos los recuerdos de mis 23
años de servicio al país.
Uno de los beneficios de mi edad, tal vez el único, es decir
lo que pienso, contundente y directo, incluso al Comandante en Jefe de las
Fuerzas Armadas de la nación. Así que
aquí van mis comentarios para usted.
Estoy molesto, enojado y decidido a no ver a mi país morir
antes que yo pero parece que a usted no le importará tanto o nada de concederme
ese deseo. No puedo figurarme de qué
país es usted presidente. Usted viaja
todo el mundo diciéndole lo mismo a amigos que enemigos despreciables mentiras
como:
Ya no somos una nación cristiana, Estados Unidos es arrogante... Su esposa aún tuvo el atrevimiento de
anunciarle al mundo que Estados Unidos de América es de acciones mal intencionadas.
Hágame un favor: dígale que vaya e intente decirle esas tonterías a las veintitrés generaciones de nuestros muertos en guerra cuyos restos reposan alrededor del mundo que murieron por ninguna otra razón que no fuera liberar a incontables cantidades de extranjeros de la tiranía y la desesperanza.
Hágame un favor: dígale que vaya e intente decirle esas tonterías a las veintitrés generaciones de nuestros muertos en guerra cuyos restos reposan alrededor del mundo que murieron por ninguna otra razón que no fuera liberar a incontables cantidades de extranjeros de la tiranía y la desesperanza.
Yo le diré que ambos son una verguenza y no creo que ustedes
amen a América ni veo en ustedes una pizca de gratitud en todo lo que hacen
ante las bondades que este país les ha otorgado. No tener vergüenza o agradecimiento es algo
peligroso para un hombre que habita en la Casa Blanca.
Luego de septiembre once (9/11) usted dijo "Estados
Unidos no ha cumplido con sus ideales."
¿A qué ideales se refería? ¿Era este el concepto de libertad
personal de once mil agricultores y comerciantes que murieron por ganar su
independencia de los británicos? ¿O tal vez el ideal de que ningún hombre debe
ser esclavo de otro hombre, ideal por el que 500,000 hombres murieron en la
Guerra Civil? Espero que no se refiera
tampoco a los ideales de 470.000 padres, hermanos, esposos y muchos amigos que
conocía personalmente que murieron en la Segunda Guerra Mundial, ya que fue nuestra convicción de que ninguna nación nos fuera antagonista porque creemos
en la libertad. No creo que usted se
refiera tampoco al ideal que proclama que la igualdad es mejor que la
discriminación. Usted conoce muy bien el ideal que mucha gente de la raza
blanca entendió cuando lo ayudaron a ser electo.
Tome un pequeño consejo de un anciano de muchos años,
joven. Compóngase y comience a actuar
como un americano. Si no lo hace, voy a
hacer todo lo que esté a mi alcance para que lo saquen del alquiler de lujo que
ocupa en la Pennsylvania Avenue. Usted fue electo para dirigir y no ceder,
pidiendo disculpas y besándole las manos a los asesinos y líderes corruptos
que todavía tratan a sus constituyentes como esclavos.
¿Y quién usted se cree que es, al solicitarle a los
estadounidenses a no llegar a conclusiones y condenar a un mayor del ejército,
musulmán de credo religioso, que mató a trece de sus compañeros soldados e hirió a
decenas más en Texas? ¿Quiere decir que no quiere que nosotros hagamos lo que
hicimos cuando aquel policía blanco utilizó la fuerza para someter al profesor
universitario negro en Massachusetts? ¿No le importa ofender a la policía
llamándola estúpida, pero no quiere que ofendamos a los fanáticos musulmanes
llamándoles lo que son: terroristas?
Una cosa más. Me doy
cuenta de que usted nunca estuvo en servicio militar y nunca tuvo que defender
su país con su vida pero es usted el Comandante en Jefe ahora, hijo. Haga su trabajo. Cuando un aguerrido general
de campo le pida 40,000 soldados más para completar la misión, déselos. Pero si usted no está en el mejor espíritu y
convicción de ganar la lucha, sálgase del medio. La vida de un soldado estadounidense vale
mucho mas que la mejor estrategia política que usted pueda concebir.
Usted podría ser un gran presidente porque se enfrenta al
mayor desafío presentado a ningún otro presidente.
No va a restaurar la grandeza americana al traer de vuelta a
su sitial a nuestra maltrecha economía. Esa no es nuestra mayor amenaza. Evitar perder el corazón, el alma y el
espíritu de lo que somos como estadounidenses es nuestra mas grande batalla.
Y le aseguro que no quiero pensar que nuestro presidente es
el enemigo en esta batalla final.
Sinceramente,
Harold B. Estes
®DERECHOS RESERVADOS
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